Bizcocho de Yogur

Hoy estoy especialmente contento porque a parte de la receta que os quiero presentar (que es de esas tradicionales de toda la vida, y que sí o sí hay que hacer alguna vez), os enseño un par de fotitos de una prueba que acabo de hacer y que ha quedado perfecta! Un peaso de pan de payés...

pero esto lo dejamos para otro día, hoy nos toca hacer un Bizcocho tradicional de Yogur, el que hemos visto hacer alguna vez en casa a la mama o a la yaya, y que va perfecto para un vasito de leche o para acompañar a una onza de chocolate...

Este bizcocho es muyyyyy sencillo de hacer, y si seguís la receta que os paso al pie de la letra, os saldrá bien sin duda, no falla!! (y si a alguien le falla que me lo comente que buscamos el problema y lo arreglamos ;) )

Lo bueno que tiene esta receta son las medidas, ya que para todo vamos a usar la medida que nos da el recipiente del yogur (o sea, vaciáis el yogur en un cuenco, y usamos el recipiente del yogur para medir los demás ingredientes... fácil ¿verdad?)

¿nos ponemos a currar un poquito? A cocinar!!

Ingredientes:

• 3 huevos
• 1 Yogur de limón
• 3 medidas (bote de yogur) de harina
• 2 medidas de azúcar
• 1 medida de aceite de oliva
• 1 sobre de levadura
• Ralladura de un limón

Preparación:

• Para que no se nos pase, ponemos a calentar el horno, arriba y abajo, sin ventilador, a 180 grados.
• En un bol, ponemos los tres huevos y el azúcar, y mezclamos bien con una varilla manual o cuchara de madera.
• Añadimos el yogur y el aceite y volvemos a mezclar bien.
• Con el limón bien limpio, rallamos la cáscara (sólo una capa fina, lo amarillo, sin llegar a lo blanco de debajo porque amarga)
• Tamizamos (ponemos en un rallador y espolvoreamos) la harina y la levadura, y volvemos a remover y mezclar todo bien.
• Ya tenemos la masa preparada, y para que no hayan dudas, así tiene que quedar...

• Untamos un molde con mantequilla, y lo espolvoreamos con harina para que quede de la siguiente forma, y luego ponemos dentro la masa... el molde enharinado queda así...

• Metemos en el horno (en el centro) 40 minutos a 180 grados... y tachán!! ya tenemos bizcocho!!

Queda genial, esponjoso y suave!! 

Si os gusta le podéis poner azúcar glas por encima, pero mucha gente lo prefiere así tal cual, que ya queda buenísimo!!

Un abrazo y que aproveche!

Ernesto